El resultado del cuarto trimestre por debajo del año 2021 ha interrumpido la tendencia de crecimiento sostenido del sector desde 2015 en el propio trimestre (a excepción del año de la pandemia), según informan desde Anefhop. Los principales factores que han contribuido a la disminución de la producción han sido el aumento de los costes de los materiales, la inflación, el elevado número de licitaciones desiertas y la incertidumbre económica.
Los representantes de la Asociación Nacional Española de Fabricantes de Hormigón Preparado (Anefhop) en Andalucía han trasladado la preocupación del sector ante las perspectivas para este año, marcadas por la incertidumbre económica y la inflación, la subida del precio del cemento y de otras materias primas, de los combustibles, de los aditivos, del transporte, de la energía, de los costes laborales y salariales, entre otros.
El principal responsable de estos datos continúa siendo la mala evolución de las ventas de clínker en el exterior, responsable de la pérdida de 79.000 toneladas el pasado mes, según recoge el último Informe de Coyuntura Económica de la Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción (Cepco). Asimismo se destaca en el informe, la caída del consumo del cemento en febrero un 7,1%, según los últimos datos publicados en la Estadística del Cemento.
El aumento del precio de muchos productos y el cambio climático obligan a buscar soluciones constructivas sostenibles. El Gremi de Rajolers de la Comunitat Valenciana e Hispalyt recuerdan la idoneidad de las soluciones constructivas con la teja cerámica por su elevada eficiencia energética, bajo mantenimiento y gran durabilidad.
La evolución del mes de febrero se traduce en una pérdida de casi dos puntos porcentuales en el acumulado de año móvil (mar’22-feb’23). En los últimos 12 meses, el consumo ha caído un 3,4%, frente a la caída más leve del 1,6% que mantenía en enero este indicador. En valores absolutos, se han consumido un total de 14.848.011 t de cemento durante los últimos 12 meses.
La Asociación Nacional de Distribución Profesional de Materiales para la Edificación, Reforma y Rehabilitación (Andimac) señala que la avalancha de normas que se impulsan para acelerar la transición ecológica del sector dificulta la capacidad de adaptación de las empresas. En su opinión, los excesos regulatorios, y más por la vía de urgencia, dificultan la adaptación práctica de sectores tan amplios, diversos y complejos como la construcción.
Lamentablemente esta caída viene a refrendar los malos datos que se registran desde el último trimestre del 2022, según explican desde la Asociación Nacional de la Industria del Prefabricado de Hormigón (Andece), que no obstante puntualizan que el mes de febrero 2023 no ha sido tan negativo como el mes anterior, ralentizándose el ritmo de caída.
Las exportaciones de materiales de construcción en España cerraron el ejercicio 2022 con un valor de 30.735 millones de euros, un crecimiento del 10,7% respecto al ejercicio anterior. Estas cifras representan el 7,9% de la exportación total española y el saldo comercial alcanza los 7.117 millones de euros, un 9,8% más que el ejercicio 2021, según recoge el último Informe de Coyuntura Económica de la Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción (Cepco).
El 54% de los residuos generados en las obras en España se envían al vertedero y entre el 10% y el 15% de los materiales se desperdician durante el proceso de construcción, según el informe Economía circular en la edificación, elaborado por Green Building Council España (GBCe). Ante esta realidad, las políticas europeas están empujando hacia un cambio de modelo en el sector.
El consumo de cemento ha arrancado el año con un crecimiento en enero del 5,4 %, lo que lo sitúa, en valores absolutos, en 1.066.959 toneladas, 54.924 más que en el mismo mes de 2022, según recogen los últimos datos publicados en la Estadística del Cemento. En datos acumulados de año móvil (feb’22-ene’23), se mantiene una caída del -1,6%.
El índice de actividad de la construcción vuelve a adentrarse, aunque ligeramente, en terreno negativo. Los costes de los materiales y la falta de mano de obra cualificada continúan siendo algunos de los factores que hacen que el sector siga debilitándose. A ello se le suma un descenso de la actividad en el ámbito residencial. Estas son solo algunas de las principales conclusiones del “Informe diagnóstico de la construcción del cuarto trimestre de 2022”, elaborado conjuntamente por Rics-CGATE.
En valores absolutos, la cifra de consumo asciende a las 14.911.448 toneladas, 120.057 t menos que en 2021 pero que aún permite mantener los volúmenes de consumo en el entorno de los 15 millones de toneladas, según los últimos datos publicados en la Estadística del Cemento. La ejecución real de la obra pública será clave para mitigar la nueva contracción del consumo de cemento prevista para 2023.